Boris Johnson logra la mayoría absoluta para culminar el Brexit

Iniciado por El_Andaluz, 13 Diciembre 2019, 15:13 PM

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El_Andaluz


Boris Jonhson ha prometido un "nuevo amanecer" para el Reino Unido tras su victoria en las "elecciones del Brexit", en las que ha logrado la mayoría más aplastante del Partido Conservador desde la era Thatcher (364 escaños frente a 203 del Partido Laborista). Exultante y triunfalista, con su incorregible sentido del humor, Johnson proclamó a primera hora de la mañana: "Vamos a culminar el Brexit, pero primero vamos a consumar el desayuno".

"Ha sido una irrefutable, irresistible e indiscutible decisión del pueblo", sentenció Johnson. "Vamos a dejar de lado la miserable amenaza de un segundo referéndum y a recuperar el control de nuestras fronteras, nuestro dinero y nuestro comercio. Vamos a liberar todo el potencial de este país".

Bajo un cartel donde podía leerse "El Gobierno del pueblo", Boris Johnson prometió dirigir el país bajo los principios del conservadurismo moderado de "una nación". El "premier" regresó a Downing Street acompañado por su novia Carrie Symonds y luego despachó con la reina Isabel II durante más de media hora y recibió el encargo de formar nuevo Gobierno.

Johnson quiere tener listo su nuevo gabinete el lunes y ha anunciado su intención de someter a votación en el Parlamento su acuerdo del Brexit el próximo viernes, un día después del protocolario Discurso de la Reina.


[youtube=640,360]https://youtu.be/Wp6XzK7E6ks[/youtube]


El balance de la noche electoral refleja cómo la ola azul conservadora ha derribado el "muro" rojo laborista en prácticamente toda Inglaterra y gran parte de Gales, mientras que Escocia e Irlanda del Norte despuntan como los dos grandes obstáculos para Boris Johnson en sus cinco años de mandato.

Las elecciones anticipadas confirmaron el renovado ascenso del Partido Nacional Escocés (SNP) de Nicola Sturgeon, que logró 48 diputados con su promesa de un nuevo referéndum de independencia en el 2020.

Sturgeon aprovechó la ocasión para lanzar un órdago a Johnson e interpretar los resultados como "un mandato renovado y reforzado a favor de la independecia".

Jeremy Corbyn, que obtuvo los peores resultados para el laborismo desde 1935, reconoció que había sido "una noche muy decepcionante" y anticipó su marcha paulatina hasta que "se produzca un relevo tras una reflexión interna".

Corbyn pichó estrepitosamente con su decisión de declararse "neutral" ante el Brexit y centrar su campaña en la sanidad pública y las reformas económicas. La mayoría de sus votantes no le han perdonado su ambigüedad en una campaña marcada por la dimisión de su número dos, el moderado Tom Watson.


EL FIN DEL "MURO ROJO" DEL NORTE DE INGLATERRA

La debacle del Partido Laborista se tradujo en el derribo del histórico "muro rojo" en el norte industrial de Inglaterra, que se tiñó de azul por el voto favorable al Brexit. Uno tras otro los feudos laboristas cayeron en manos de los conservadores, incluido el viejo distrito electoral de Tony Blair, Sedgefield, que votaba laborista desde 1935. Jeremy Corbyn se consoló apenas con algunos de los bastiones tradicionales en Londres, mientras sus posibles sucesores (Keir Starmer, Emily Thornberry) traman ya el asalto al poder y viraje el partido hacia posiciones más moderadas tras el fiasco final del corbynimso la cabo de cuatro años.

Por su parte, con tan solo 11 diputados, el Partido Liberal Demócrata experimentó una severa derrota con su mensaje "Stop Brexit" y su líder Jo Swinson presentó sobre la marcha su dimisión. Swinson, de 39 años, no ha sabido capitalizar el voto de la permanencia.

El Partido Conservador logró al final el 45% de los votos y marcó una distancia de 12 puntos sobre el Partido Laborista (33%), superior a la que vaticinaron las encuestas. El Partido Liberal Demócrata cayó hasta el 11% y el Partido del Brexit de Nigel Farage, vencedor en las últimas elecciones europeas, apenas logró el 2% de los votos.

FELICITACIÓN DE TRUMP Y REACCIÓN DE LA UE

Las reacciones a la gran victoria conservadora no se han hecho esperar. Donald Trump se ha lanzado a felicitar a su colega británico por su "gran" victoria. Asimismo, ha avanzado que ahora Reino Unido y EEUU son libres para acordar un nuevo tratado comercial después del Brexit.

Por su parte, los dirigentes europeos pretenden encargar a Michel Barnier una relación comercial estrecha con Reino Unido tras la victoria de Johnson con la vista puesta en la salida ordenada de la UE el próximo 31 de enero.

"Estamos preparados para las próximas etapas, vamos a ver si es posible para el Parlamento Británico aceptar el acuerdo de retirada y tomar una decisión", ha dicho el nuevo presidente del Consejo Europeo, Charles Michel.








Machacador

Muy bueno que se hayan puesto de acuerdo la mayoría de los británicos...

:rolleyes: :o :rolleyes:
"Solo tu perro puede admirarte mas de lo que tu te admiras a ti mismo"

Eternal Idol

La economía nunca ha sido libre: o la controla el Estado en beneficio del Pueblo o lo hacen los grandes consorcios en perjuicio de éste.
Juan Domingo Perón

El_Andaluz

#3
Habrá que respetar lo que ha elegido la mayoría de la población británica, Boris Johnson arrasa en su país y el independentismo en Escocia también arrasa.

"Escocia ha enviado un mensaje muy claro: no queremos un gobierno de Boris Johnson y no queremos marchar de la UE", ha añadido.


Escocia quiere seguir dentro de la Unión Europea y me parece bien tienen bastante recursos para subsistir sin reino Unido tiene una economía fuerte.

Eso si ya que se van de la Unión Europea espero que no joda mucho a la gente que viven en Gibraltar y cerca del peñón.


crazykenny

Cita de: El_Andaluz en 13 Diciembre 2019, 16:43 PM
Habrá que respetar lo que ha elegido la mayoría de la población británica, Boris Johnson arrasa en su país y el independentismo en Escocia también arrasa.

"Escocia ha enviado un mensaje muy claro: no queremos un gobierno de Boris Johnson y no queremos marchar de la UE", ha añadido.


Escocia quiere seguir dentro de la Unión Europea y me parece bien tienen bastante recursos para subsistir sin reino Unido tiene una economía fuerte.

Eso si ya que se van de la Unión Europea espero que no joda mucho a la gente que viven en Gibraltar y cerca del peñón.



Bueno, El_Andaluz, es que es lo que hay que hacer en todos los casos donde un pueblo decide ser independiente y dejar de formar parte de X,, ya sea Escocia, el Reino Unido, y, ya que estamos con este tema, Catalunya.

Muchas gracias por vuestra atención, y, bueno, saludos.
A nivel personal, lo que me da mas miedo no son los planteamientos y acciones individuales, sino las realizadas en grupo, ya que estas ultimas pueden acabar con consecuencias especialmente nefastas para todos.
Se responsable, consecuente y da ejemplo.
http://informaticayotrostemas.blogspot.com.es/2013/12/situacion-de-la-educacion-actual-en.html
https://informaticayotrostemas.blogspot.com/

El_Andaluz

crazykenny
CitarBueno, El_Andaluz, es que es lo que hay que hacer en todos los casos donde un pueblo decide ser independiente y dejar de formar parte de X,, ya sea Escocia, el Reino Unido, y, ya que estamos con este tema, Catalunya.

Muchas gracias por vuestra atención, y, bueno, saludos.

Cataluña no tiene nada que ver con la independencia de Escocia son dos cosas totalmente diferente.

Escocía era antes un país antes de juntarse con los Británicos, que no es el caso de Cataluña que nunca fue independiente.

crazykenny

#6
Cita de: El_Andaluz en 13 Diciembre 2019, 17:55 PM
crazykenny
Cataluña no tiene nada que ver con la independencia de Escocia son dos cosas totalmente diferente.

Escocía era antes un país antes de juntarse con los Británicos, que no es el caso de Cataluña que nunca fue independiente.


Veamos, El_Andaluz, ...

Formacion de España;

FUENTE: https://es.wikipedia.org/wiki/Historia_de_Espa%C3%B1a#Historia_moderna_de_Espa%C3%B1a;


En 1469, con el matrimonio de Isabel y Fernando, príncipe heredero de Aragón se consuma la unión dinástica de los reinos de Castilla y Aragón en 1479, aunque ambos territorios matendrían sus leyes e instituciones propias hasta 1707 (ver decretos de Nueva Planta), eso sí, bajo el mandato del mismo monarca.79​

Antes de ello, entre 1474, año de la muerte de Enrique IV, y 1479 empezó una guerra civil por la sucesión de la corona de Castilla entre partidarios de Isabel y partidarios de Juana la Beltraneja, hermanastra e hija legítima de Enrique IV, respectivamente, casada con el rey de Portugal, que de haber ganado los partidarios de Juana hubiera producido la unión de Castilla con Portugal.80​


La reconquista finaliza en 1492 con la toma de Granada por los Reyes Católicos. En este mismo año se produce la expulsión de los judíos y el descubrimiento de América; la expedición de La Pinta, La Niña y La Santa María comandada por el navegante Cristóbal Colón y sufragada por la corona española, arribaría a una isla llamada Guanahani el viernes 12 de octubre de 1492.

En los siglos xv y xvi, la población de la península ibérica se concentraba en los territorios de la corona de Castilla, principalmente el valle del Duero, Andalucía y la Mancha. La población de la Corona de Castilla creció de unos 3,4 millones de habitantes en 1400 a 4,5 millones en 1530 y 6,5 millones en 1590.81​ Desde principios del siglo xv se produjo el boom de la lana merina castellana, que gracias al desarrollo de nuevas técnicas de hilatura alcanzó gran difusión internacional y se convirtió en la materia prima principal de los tejidos hechos en Flandes. Mercaderes castellanos se establecieron en las principales ciudades de Europa Occidental e introdujeron técnicas comerciales como las letras de cambio y los seguros marítimos.81​


Conquista de las islas Canarias

La conquista de las islas Canarias por parte de la Corona de Castilla se llevó a cabo entre 1402 (con la conquista de Lanzarote) y 1496 (con la conquista de Tenerife). Se pueden distinguir dos periodos en este proceso: la Conquista señorial, llevada a cabo por la nobleza a cambio de un pacto de vasallaje, y la Conquista realenga, llevada a cabo directamente por la Corona, durante el reinado de los Reyes Católicos.

No fue una empresa sencilla en lo militar, dada la resistencia aborigen en algunas islas. Tampoco lo fue en lo político, puesto que confluyeron los intereses particulares de la nobleza (empeñada en fortalecer su poder económico y político mediante la adquisición de las islas) y los estados, particularmente Castilla, en plena fase de expansión territorial y en un proceso de fortalecimiento de la Corona frente a la nobleza.

Para su estudio, los historiadores distinguen dos periodos en la conquista de Canarias:

Conquista señorial. Se conoce con este nombre a la conquista llevada a cabo por la nobleza, en beneficio propio y sin una participación directa de la Corona, que otorga el derecho de conquista a cambio de un pacto de vasallaje del noble conquistador hacia la Corona. Distinguiremos dentro de ella la conocida como Conquista Betancuriana o Normanda, llevada a cabo por Jean de Bethencourt y Gadifer de la Salle entre 1402 y 1405 y que afectó a las islas de Lanzarote, El Hierro y Fuerteventura. La otra fase se conoce como Conquista Señorial castellana, llevada a cabo por nobles castellanos que se apropiaron, mediante compras, cesiones y matrimonios, de las primeras islas conquistadas e incorporaron la isla de La Gomera hacia 1450.
Conquista realenga. Este término define a la conquista llevada a cabo directamente por la corona de Castilla, durante el reinado de los Reyes Católicos quienes armaron y en parte financiaron la conquista de las islas que faltaban por dominar: Gran Canaria, La Palma y Tenerife. En el año 1496, llegó la conquista a su fin con el dominio de la isla de Tenerife, integrándose el Archipiélago Canario en la Corona de Castilla. La conquista realenga tuvo lugar entre 1478 y 1496.


Cuando se formo Catalunya (antes de unirse a la Corona de Aragon, lo que ahora es España):

FUENTE: https://es.wikipedia.org/wiki/Historia_de_Catalu%C3%B1a#Independencia_de_los_condados_catalanes:_siglo_X


Independencia de los condados catalanes: siglo X

Durante el siglo X, los condados se convirtieron en verdaderos condados independientes del poder carolingio, según el poder central del Imperio se debilitaba, y las guerras civiles, de sucesión, hacían su trabajo de desgaste, un hecho que el conde Borrell II oficializó en el 987 al no prestar juramento al primer monarca de la dinastía de los Capeto.5​ En estos años de formación de los condados, se desarrollaron los primeros pasos de repoblación del territorio tras la invasión musulmana, trayendo grandes contingentes de población de los territorios dentro del Imperio carolingio que eran dominios poseídos por los Condes de Barcelona como súbditos del Imperio, la repoblación se hizo principalmente con población del sur de Francia (las diferencias con la población actual del sur de Francia vienen a raíz de la aniquilación de esta población en las guerras contra la herejía de los cátaros, y la repoblación con habitantes del norte de Francia). Así, durante los siglos IX y X se creó una sociedad donde predominaban pequeños propietarios libres, llamados aloers, enmarcados en una sociedad agraria donde cada núcleo familiar producía lo que consumía, generando muy pocos excedentes, y típica de la Edad Media.

Cataluña feudal: siglo XI

El siglo XI se caracteriza en Cataluña por el desarrollo de la sociedad feudal, como consecuencia de las presiones señoriales para desarrollar lazos de vasallaje con los campesinos libres (alodiales, en catalán aloers). Los años centrales del siglo se caracterizaron por una guerra social virulenta, donde la violencia señorial arrolló a los campesinos, gracias a las ventajas que obtenían de las nuevas tácticas militares, la caballería pesada, y basadas en la contratación de mercenarios bien armados y a caballo.

Así, a finales del siglo, la mayoría de los campesinos propietarios se habían convertido en siervos sometidos al señor. Este proceso coincidió con un debilitamiento del poder de los condes y la división del territorio en numerosos señoríos, que con el paso del tiempo, daría lugar a la articulación de un Estado feudal basado en complejas fidelidades y dependencias, en lo alto del cual se encontraría el conde de Barcelona, tras el triunfo sobre el resto de señores de Ramón Berenguer I. Con el tiempo, los condes de Barcelona vincularían a todos los demás condados catalanes con el condado que posteriormente pasaría a formar parte de la Corona de Aragón.

Es también en este periodo, durante el siglo XI, cuando se consolidan la Taifa de Tortosa y la Taifa de Larida.

Expansión de los condados catalanes: siglo XII
Hasta mediados del siglo XII, los sucesivos condes de Barcelona intentaron ampliar sus territorios en múltiples direcciones y por diversos medios. Ramón Berenguer III (1082-1131) incorporó mediante alianza matrimonial el condado de Besalú (1111), recibió por herencia el de Cerdaña (1117 o 1118), y conquistó por la fuerza parte del condado de Ampurias (entre 1123 y 1131). Más allá de los Pirineos, también controló el de Provenza (desde 1112), que al morir legó a su segundo hijo Berenguer Ramón.7​ Por su parte, en 1118 la Iglesia catalana se independizó de la sede de Narbona y fue restaurada la sede de Tarragona.


Siglo XII al XV: La Corona de Aragón:

Bajo el gobierno del conde Ramón Berenguer IV (1131-1162), se produjeron diferentes hechos fundamentales para la historia de Cataluña. El primero, su boda con Petronila de Aragón, lo que supuso la unión dinástica, del condado de Barcelona y del Reino de Aragón, por lo que con el tiempo el territorio común sería denominado Corona de Aragón. Como consecuencia de tal tipo de unión, los reinos, Estados, dominios o títulos así unidos no fueron integrados o fusionados, sino que las mismas personas poseían cada uno de ellos en forma independiente; y, por lo general los dominios del título mantenían sus propias instituciones y legislación (particularismo). Según lo acordado en las Capitulaciones matrimoniales de Barbastro en agosto de 1137, Ramón Berenguer pasó a ser el princeps o dominador de Aragón, ya que el rey aragonés Ramiro le hizo donación de su hija y de su reino para que la tuviera a ella y al reino en dominio «salva la fidelidad a mí y a mi hija» («dono tibi, Raimundo, barchinonensium comes et marchio, filiam meam in uxorem, cum tocius regni aragonensis integritate [...] salva fidelitate mihi et filie mee.»), y se retiró a la vida monástica. Según estas capitulaciones, Ramiro no cedía su dignidad real, esto es, que en adelante sería rey, señor y padre de Ramón Berenguer tanto en Aragón como en todos sus condados.


Bueno, El_Andaluz, lo indico con las respectivas fuentes para que veas que no me lo invento.

Ademas, siento decírtelo de este modo, pero no estamos hablando de los siglos 9 y 14 antes de cristo, sino de los siglos 9 y 14 despues de cristo...  ;)

Muchas gracias por vuestra atención, y, bueno, saludos.
A nivel personal, lo que me da mas miedo no son los planteamientos y acciones individuales, sino las realizadas en grupo, ya que estas ultimas pueden acabar con consecuencias especialmente nefastas para todos.
Se responsable, consecuente y da ejemplo.
http://informaticayotrostemas.blogspot.com.es/2013/12/situacion-de-la-educacion-actual-en.html
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El_Andaluz

Vale ya que vas citando fuente yo te pongo otra para que veas que no tiene nada que ver lo que tu me pones hay con lo que yo te voy a citar:

Y te pido que lo leas entero.

Por qué el caso de Cataluña no es como el de Escocia


Santiago Muñoz Machado dice que el nacionalismo catalán tiene por costumbre compararse con cualquier territorio que haya solicitado u obtenido la independencia, sin considerar las circunstancias políticas, sociales o históricas. «Lo mismo les da, en ese sentido, Groenlandia que Kosovo», apunta.

Hace unos días, Escocia volvía a situarse como ejemplo del agravio comparativo que, según el independentismo, sufre Cataluña. Nicola Sturgeon, ministra principal de Escocia, anunciaba su intención de celebrar un nuevo referéndum de independencia entre el otoño de 2018 y la primavera de 2019. Según ella, las circunstancias han cambiado desde 2014 -entonces el no a la independencia (55,3%) se impuso al sí (44,7%)-. Sturgeon alude esencialmente a la salida del Reino Unido de la UE que los británicos votaron en referéndum en junio de 2016. En Escocia, el 62% se pronunció a favor de la permanencia en Europa. La propia Sturgeon lo advierte: «Escocia no es lo mismo que Cataluña». Ni España es lo mismo que el Reino Unido. Para empezar, en lo que se refiere a la lealtad con el Estado.

CONSULTA PACTADA.

La noticia es precisamente que Sturgeon ha comunicado a May su intención de celebrar otro referéndum. En 2012, el Gobierno británico y el escocés firmaron un acuerdo en Edimburgo para fijar la fecha del primero. Un año después, Alex Salmond y David Cameron elaboraron el borrador para la consulta que aprobaría el Parlamento británico. Pese al histórico pactismo catalán del que tanto alardea Puigdemont, en ningún momento la Generalitat ha tenido intención alguna de buscar una solución legal. El lunes, Artur Mas fue condenado por organizar la consulta independentista del 9-N pese a la prohibición del Tribunal Constitucional. En cualquier caso, ¿sería posible organizar una consulta legal en España?

LEGALIDAD.

La diferencia clave entre Cataluña y Escocia es que el referéndum escocés de 2014 fue legal y consensuado. Y lo mismo pasará si se celebra una nueva consulta. En España, sin embargo, esto no es posible porque la Constitución proclama la indivisibilidad de la nación y atribuye al Estado (Corona, Gobierno y Cortes) la competencia exclusiva en materia de referendos. «El poder de reforma constitucional no comprende la facultad de prever, en la propia Constitución, la destrucción del Estado. Esto sólo sería posible si, en un proceso constituyente, el pueblo soberano habilitase la posibilidad de fragmentar el Estado», explica Muñoz Machado.


Reino Unido no tiene una Constitución como tal, sino una serie de documentos que, como indica el constitucionalista Jorge de Esteban, comienzan con la Carta Magna de Juan Sin Tierra (1215), a la que fueron añadiéndose convenciones y acuerdos. Muñoz Machado explica: «No tiene Gran Bretaña una Constitución escrita que se oponga a la celebración de un referéndum de independencia en Escocia. Depende de lo que decida el Parlamento británico, que no está sometido a ninguna norma superior que constriña su poder. El referéndum de 2014 se celebró tras una petición de Escocia a la que siguió un acuerdo sobre el procedimiento a seguir y el contenido de la pregunta a formular. Se utilizó, además, la fórmula de delegar poderes a Escocia, de acuerdo con la ley que regula su régimen de autonomía, para que pudiera ser convocado y organizado. El Parlamento de Escocia acordó en 1707 la Unión con Inglaterra, en un acuerdo que tiene una naturaleza semejante a un tratado internacional. Al no existir una Constitución común, se mantiene un derecho de separación que es por completo ordinario en los acuerdos de naturaleza internacional, de los que cualquiera de las partes puede separarse. Lo contrario es lo que imponen las constituciones en todos los Estados europeos, incluida España».

No existe una Constitución en Reino Unido que impida la separación


En este sentido, apunta Araceli Mangas, catedrática de Derecho Internacional y Relaciones Internacionales, «el caso de Escocia es excepcional». «El principio de unidad e integridad territorial está presente en todas las constituciones y es fundamental en el Derecho Internacional. Una parte de la población no puede romper la unidad nacional».En cualquier caso, la celebración de una nueva consulta pactada en Escocia parece improbable. Theresa May ha manifestado su intención de que el Parlamento británico no apruebe esta vez la iniciativa.

Esta parte muy importante que lo leas.

HISTORIA. Gabriel Tortella, uno de los más destacados expertos en Historia de la Economía, afirma que no existen pruebas documentales de que Cataluña haya sido nunca un país independiente. «Ni siquiera en el siglo XI, cuando esa serie de territorios pirenaicos de los que formaba parte Cataluña pasaron del Imperio Carolingio a Aragón». En 1137 Cataluña se unió definitivamente a Aragón por matrimonio y lo mismo pasó en 1479 cuando, tras el matrimonio de los Reyes Católicos y el ascenso de Fernando al trono, Aragón se integró con Castilla. Escocia, por contra, fue un reino independiente durante siglos y se unió a Inglaterra y a Gales formando el Reino Unido en 1707. Tortella además recalca las guerras de independencia que enfrentaron a Escocia e Inglaterra en los siglos XIII y XIV. «Los escoceses tienen a sus héroes, William Wallace y Andrew Moray, y llegaron a invadir el norte de Inglaterra».

En el resto de la UE ocurre lo contrario: la unidad territorial es un principio básico


Económicamente, tanto Cataluña como Escocia son regiones ricas dentro de España y Reino Unido. En esto hay similitudes. Escocia supo aprovechar bien la revolución industrial, aunque no se benefició especialmente de la expansión del imperio británico. No sería este el caso de Cataluña: su industria textil se benefició durante tres siglos de la protección arancelaria y del acceso al mercado español a raíz de la unificación económica llevada a cabo por Felipe V. En la actualidad, las dos regiones dependen del comercio con Europa, si bien Cataluña carece de los importantes yacimientos petrolíferos con los que cuenta Escocia.

LA UE. En el informe que publicó el Gobierno Británico sobre las implicaciones que tendría la independencia escocesa en febrero de 2013, destacaba sobre todo la necesidad de que los escoceses tuvieran información veraz de las consecuencias nacionales e internacionales de la independencia. Entre ellas la salida de la UE, el argumento que se esgrime ahora para celebrar un nuevo referéndum. El Gobierno de España, sin embargo, ha dejado de lado la pedagogía en torno a las consecuencias de la independencia de Cataluña. No habría que olvidar que, inicialmente, la pregunta que pretendía formular Artur Mas era: «¿Desea usted que Cataluña se convierta en un nuevo Estado de la Unión Europea?». Una posibilidad excluyente. Como advierte Mangas, sólo la posibilidad de incluir el nombre de Cataluña o Escocia en el Tratado requiere una revisión del mismo por unanimidad de todos los Estados miembros.

LA ACCIÓN DEL GOBIERNO. Araceli Mangas insiste en uno de sus artículos que España tiene mucho que aprender sobre la lealtad de los gobiernos escocés y británico durante el proceso que precedió al referéndum de 2014. Eso no ocurre en Cataluña, donde el Gobierno central ha hecho la vista gorda con la retirada de símbolos nacionales, como por ejemplo la bandera que ha dejado de ondear en los ayuntamientos sin que hubiera consecuencias legales.



Es como mezclarme pollas de aguas con nabos no tiene nada que ver una cosa con otras aunque tengan cosas parecida no lo es en realidad.

No cuela.

Si la quieres colar a otros bien pero a mi no me la cuelas porque comparar la situación de Escocía con Cataluña desde mi punto de vista es ridículo.

Escocia es un país independiente que llegó a un acuerdo en el año 1.707 con Inglaterra y como bien dice este articulo es parecido como a un tratado Internacional.

Cataluña es una simple comunidad dentro de un estado llamado Español como Andalucía demás comunidades. Es lo que hay.


crazykenny

#8
Cita de: El_Andaluz en 13 Diciembre 2019, 18:42 PM
Vale ya que vas citando fuente yo te pongo otra para que veas que no tiene nada que ver lo que tu me pones hay con lo que yo te voy a citar:

Y te pido que lo leas entero.

Por qué el caso de Cataluña no es como el de Escocia


Santiago Muñoz Machado dice que el nacionalismo catalán tiene por costumbre compararse con cualquier territorio que haya solicitado u obtenido la independencia, sin considerar las circunstancias políticas, sociales o históricas. «Lo mismo les da, en ese sentido, Groenlandia que Kosovo», apunta.

Hace unos días, Escocia volvía a situarse como ejemplo del agravio comparativo que, según el independentismo, sufre Cataluña. Nicola Sturgeon, ministra principal de Escocia, anunciaba su intención de celebrar un nuevo referéndum de independencia entre el otoño de 2018 y la primavera de 2019. Según ella, las circunstancias han cambiado desde 2014 -entonces el no a la independencia (55,3%) se impuso al sí (44,7%)-. Sturgeon alude esencialmente a la salida del Reino Unido de la UE que los británicos votaron en referéndum en junio de 2016. En Escocia, el 62% se pronunció a favor de la permanencia en Europa. La propia Sturgeon lo advierte: «Escocia no es lo mismo que Cataluña». Ni España es lo mismo que el Reino Unido. Para empezar, en lo que se refiere a la lealtad con el Estado.

CONSULTA PACTADA.

La noticia es precisamente que Sturgeon ha comunicado a May su intención de celebrar otro referéndum. En 2012, el Gobierno británico y el escocés firmaron un acuerdo en Edimburgo para fijar la fecha del primero. Un año después, Alex Salmond y David Cameron elaboraron el borrador para la consulta que aprobaría el Parlamento británico. Pese al histórico pactismo catalán del que tanto alardea Puigdemont, en ningún momento la Generalitat ha tenido intención alguna de buscar una solución legal. El lunes, Artur Mas fue condenado por organizar la consulta independentista del 9-N pese a la prohibición del Tribunal Constitucional. En cualquier caso, ¿sería posible organizar una consulta legal en España?

LEGALIDAD.

La diferencia clave entre Cataluña y Escocia es que el referéndum escocés de 2014 fue legal y consensuado. Y lo mismo pasará si se celebra una nueva consulta. En España, sin embargo, esto no es posible porque la Constitución proclama la indivisibilidad de la nación y atribuye al Estado (Corona, Gobierno y Cortes) la competencia exclusiva en materia de referendos. «El poder de reforma constitucional no comprende la facultad de prever, en la propia Constitución, la destrucción del Estado. Esto sólo sería posible si, en un proceso constituyente, el pueblo soberano habilitase la posibilidad de fragmentar el Estado», explica Muñoz Machado.


Reino Unido no tiene una Constitución como tal, sino una serie de documentos que, como indica el constitucionalista Jorge de Esteban, comienzan con la Carta Magna de Juan Sin Tierra (1215), a la que fueron añadiéndose convenciones y acuerdos. Muñoz Machado explica: «No tiene Gran Bretaña una Constitución escrita que se oponga a la celebración de un referéndum de independencia en Escocia. Depende de lo que decida el Parlamento británico, que no está sometido a ninguna norma superior que constriña su poder. El referéndum de 2014 se celebró tras una petición de Escocia a la que siguió un acuerdo sobre el procedimiento a seguir y el contenido de la pregunta a formular. Se utilizó, además, la fórmula de delegar poderes a Escocia, de acuerdo con la ley que regula su régimen de autonomía, para que pudiera ser convocado y organizado. El Parlamento de Escocia acordó en 1707 la Unión con Inglaterra, en un acuerdo que tiene una naturaleza semejante a un tratado internacional. Al no existir una Constitución común, se mantiene un derecho de separación que es por completo ordinario en los acuerdos de naturaleza internacional, de los que cualquiera de las partes puede separarse. Lo contrario es lo que imponen las constituciones en todos los Estados europeos, incluida España».

No existe una Constitución en Reino Unido que impida la separación


En este sentido, apunta Araceli Mangas, catedrática de Derecho Internacional y Relaciones Internacionales, «el caso de Escocia es excepcional». «El principio de unidad e integridad territorial está presente en todas las constituciones y es fundamental en el Derecho Internacional. Una parte de la población no puede romper la unidad nacional».En cualquier caso, la celebración de una nueva consulta pactada en Escocia parece improbable. Theresa May ha manifestado su intención de que el Parlamento británico no apruebe esta vez la iniciativa.

Esta parte muy importante que lo leas.

HISTORIA. Gabriel Tortella, uno de los más destacados expertos en Historia de la Economía, afirma que no existen pruebas documentales de que Cataluña haya sido nunca un país independiente. «Ni siquiera en el siglo XI, cuando esa serie de territorios pirenaicos de los que formaba parte Cataluña pasaron del Imperio Carolingio a Aragón». En 1137 Cataluña se unió definitivamente a Aragón por matrimonio y lo mismo pasó en 1479 cuando, tras el matrimonio de los Reyes Católicos y el ascenso de Fernando al trono, Aragón se integró con Castilla. Escocia, por contra, fue un reino independiente durante siglos y se unió a Inglaterra y a Gales formando el Reino Unido en 1707. Tortella además recalca las guerras de independencia que enfrentaron a Escocia e Inglaterra en los siglos XIII y XIV. «Los escoceses tienen a sus héroes, William Wallace y Andrew Moray, y llegaron a invadir el norte de Inglaterra».

En el resto de la UE ocurre lo contrario: la unidad territorial es un principio básico


Económicamente, tanto Cataluña como Escocia son regiones ricas dentro de España y Reino Unido. En esto hay similitudes. Escocia supo aprovechar bien la revolución industrial, aunque no se benefició especialmente de la expansión del imperio británico. No sería este el caso de Cataluña: su industria textil se benefició durante tres siglos de la protección arancelaria y del acceso al mercado español a raíz de la unificación económica llevada a cabo por Felipe V. En la actualidad, las dos regiones dependen del comercio con Europa, si bien Cataluña carece de los importantes yacimientos petrolíferos con los que cuenta Escocia.

LA UE. En el informe que publicó el Gobierno Británico sobre las implicaciones que tendría la independencia escocesa en febrero de 2013, destacaba sobre todo la necesidad de que los escoceses tuvieran información veraz de las consecuencias nacionales e internacionales de la independencia. Entre ellas la salida de la UE, el argumento que se esgrime ahora para celebrar un nuevo referéndum. El Gobierno de España, sin embargo, ha dejado de lado la pedagogía en torno a las consecuencias de la independencia de Cataluña. No habría que olvidar que, inicialmente, la pregunta que pretendía formular Artur Mas era: «¿Desea usted que Cataluña se convierta en un nuevo Estado de la Unión Europea?». Una posibilidad excluyente. Como advierte Mangas, sólo la posibilidad de incluir el nombre de Cataluña o Escocia en el Tratado requiere una revisión del mismo por unanimidad de todos los Estados miembros.

LA ACCIÓN DEL GOBIERNO. Araceli Mangas insiste en uno de sus artículos que España tiene mucho que aprender sobre la lealtad de los gobiernos escocés y británico durante el proceso que precedió al referéndum de 2014. Eso no ocurre en Cataluña, donde el Gobierno central ha hecho la vista gorda con la retirada de símbolos nacionales, como por ejemplo la bandera que ha dejado de ondear en los ayuntamientos sin que hubiera consecuencias legales.



Es como mezclarme pollas de aguas con nabos no tiene nada que ver una cosa con otras aunque tengan cosas parecida no lo es en realidad.

No cuela.

Si la quieres colar a otros bien pero a mi no me la cuelas porque comparar la situación de Escocía con Cataluña desde mi punto de vista es ridículo.

Escocia es un país independiente que llegó a un acuerdo en el año 1.707 con Inglaterra y como bien dice este articulo es parecido como a un tratado Internacional.

Cataluña es una simple comunidad dentro de un estado llamado Español como Andalucía demás comunidades. Es lo que hay.



Bien, dado que pones en duda la credibilidad de la fuente, te pregunto; ¿puedes decir lo mismo de lo siguiente?;

Toma de Gibraltar (1704)

FUENTE: https://es.wikipedia.org/wiki/Disputa_territorial_de_Gibraltar#La_toma_de_Gibraltar_y_el_Tratado_de_Utrecht


Toma de Gibraltar (1704):

La toma de Gibraltar tuvo lugar el 4 de agosto de 1704 en el contexto de la guerra de sucesión española por parte de la flota angloholandesa comandada por George Rooke y el príncipe de Hesse-Darmstadt. La intención del ataque era la de añadir la fuerte plaza de Gibraltar a la causa del Archiduque Carlos.

El gobierno de la ciudad, sin embargo, se mostró fiel a Felipe V. Los enfrentamientos entre la flota de la bahía de Algeciras y la guarnición española apenas duraron dos días cuando,con un gran desequilibrio entre las tropas sitiadoras y defensoras, los soldados ingleses del capitán Whitaker lograron tomar tierra en el Muelle Nuevo de la ciudad, tomaron rehenes entre la población civil y obligaron a los mandos españoles a levantar bandera parlamentaria e iniciar las negociaciones de la rendición y capitulación que tendría lugar el 4 de agosto.

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Capitulación y toma de Gibraltar

Entre los refugiados de la ermita de la Virgen de Europa corrió entonces la voz de que el enemigo se encontraba en tierra y regresaron a la ciudad a defender sus posesiones; la confusión cundió entre los defensores cuando varios proyectiles cayeron cerca de los civiles dando la impresión de que se hacía fuego contra ellos. Situados los sitiadores entre la ciudad y la capilla quedaron retenidas mujeres y niños en este punto por los hombres del Almirante Byng.21​ Ante tal imagen Diego de Salinas y sus oficiales decidieron tras cinco horas de bombardeo levantar bandera parlamentaria. El fuego sobre Gibraltar cesó y varios oficiales anglo-holandeses acudieron al cabildo de la ciudad a debatir las condiciones de la capitulación. El alcalde Cayo Antonio y los regidores gibraltareños expusieron su disposición a rendir la ciudad al considerarla indefendible solicitando las condiciones más beneficiosas para ellos previa liberación de los rehenes de Punta de Europa.22​


El último de Gibraltar, obra de Augusto Ferrer-Dalmau, representa a Diego de Salinas en 1704.
Esta tradicional versión del conflicto ha sido contradicha por la crítica reciente. Según ésta al rendirse, la plaza disponía de prácticamente toda su artillería, abundante munición, pólvora, agua y suministros. No había padecido apenas bajas y sus defensas se encontraban casi intactas.23​24​ Así la toma de rehenes por los marinos ingleses aparece como causa fundamental de la capitulación de una plaza que, según las propias fuentes inglesas, podría haber resistido largo tiempo.25​ En 1702 estas mismas tropas invasoras habían cometido todo tipo de desmanes contra la población civil en la bahía de Cádiz.26​

La ciudad fue entregada finalmente el 4 de agosto por el gobernador al Príncipe de Hesse-Darmstadt al ser aceptados por las dos partes los seis puntos principales de la capitulación de Gibraltar: que los oficiales y soldados podrían salir con sus armas, los soldados con lo que pudieran cargar en sus hombros y los caballeros con sus caballos, que se podrían sacar de la ciudad tres cañones con 12 cargas de pólvora y balas, que los gibraltareños podrían cargar con pan, carne y vino para 7 días de marcha, que se podría así mismo cargar con la ropa y los cofres de oficiales y cabildo y lo que quedara en la ciudad podría ser enviado más tarde, que a todo aquel que permaneciera en la ciudad se le respetarían todos los privilegios que tuvieran así como los tribunales de la ciudad y derechos religiosos y por último que los mandos militares de Gibraltar debían señalar la posición de todos los almacenes de pólvora, munición y armas de la ciudad. Quedaban excluidos de esta capitulación todos los ciudadanos franceses que quedarían como prisioneros de guerra siendo sus bienes confiscados.27​

Tras firmar la capitulación el cabildo de Gibraltar redactó y mandó una carta al rey de España en la que se exponían las condiciones en las que se había desarrollado el sitio, las escasas defensas con las que contaban para defender la ciudad y el sacrificio de los gibraltareños al exponerse a una fuerza militar muy superior.28​ Al día siguiente los gibraltareños que decidieron abandonar la ciudad salían por la Puerta de Tierra hacia las poblaciones cercanas desfilando junto a sus banderas, el pendón de la ciudad y entre redobles de tambores.20​ De los aproximadamente 5000 habitantes de Gibraltar permanecieron en ella no más de 70 personas, muchas de ellas enfermas y un número importante de religiosos como el párroco de la Iglesia de Santa María, Juan Romero de Figueroa.





Y, por otra parte;

Tratado de Utrecht

FUENTE: https://es.wikipedia.org/wiki/Tratado_de_Utrecht


El Tratado de Utrecht, también conocido como Paz de Utrecht o Tratado de Utrecht-Rastatt, es, en realidad, un conjunto de tratados firmados por los estados antagonistas en la Guerra de Sucesión Española entre los años 1713 y 1715 en la ciudad neerlandesa de Utrecht y en la alemana de Rastatt. Los tratados ponen fin a la guerra, aunque posteriormente a su firma continuaron las hostilidades en territorio español hasta julio de 1715, momento en que el marqués de Asfeld tomó la isla de Mallorca. En este tratado Europa cambió su mapa político.

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Los tratados entre Gran Bretaña y España

Tres meses después los representantes de Felipe V —que habían permanecido retenidos en París casi un año (entre mayo de 1712 y marzo de 1713) por orden del marqués de Torcy para que no interfirieran en las negociaciones, aunque con la excusa de que necesitaban un pasaporte para ir a Utrecht—16​ se incorporaban al acuerdo con la firma el 13 de julio del tratado entre el reino de Gran Bretaña y el reino de España.17​ Los embajadores de Felipe V, el duque de Osuna y el marqués de Monteleón, llevaban instrucciones muy precisas de su rey como que mantuvieran el reino de Nápoles para su Corona o que «nación ninguna ha de traficar derechamente en las Indias ni ha de llegar a sus puertos y costas» y en caso de concederles ventajas las naves serán españolas y deberán partir y retornar a puertos españoles. Un tema al que concedía mucha importancia era el referido al caso de los catalanes —en aquellos momentos Barcelona todavía resistía el cerco borbónico— sobre el que afirmaba que «de ninguna manera se den oídos a propósito de pacto que mire a que los catalanes se les conserven sus pretendidos fueros».18​

De las instrucciones que recibieron de Felipe V los plenipotenciarios tuvieron que hacer concesiones en todos los apartados, y su único éxito en realidad fue mantener lo referido al caso de los catalanes. Gran Bretaña recibió Gibraltar y Menorca y amplias ventajas comerciales en el imperio español de las Indias, concretadas en el asiento de negros, que fue concedido a la South Sea Company y en virtud del cual podía enviar a la América española un total de 144 000 esclavos durante treinta años, y el navío de permiso anual, un barco de 500 toneladas autorizado a transportar bienes y mercancías a la feria de Portobelo y libres de aranceles. Con estas dos concesiones se rompía por primera vez el monopolio comercial que había mantenido la Monarquía Hispánica para sus vasallos castellanos durante los dos siglos anteriores —los términos en que debía operar el navío de permiso fueron concretados en un sentido aún más favorable para los intereses británicos en el tratado comercial que se firmó en 1716—.19​

Le siguieron otros 19 tratados y convenciones bilaterales y multilaterales entre los estados y monarquías presentes en Utrecht, entre los que destacan:

Tratados entre Francia y las Provincias Unidas, Brandeburgo, Portugal y el ducado de Saboya (julio de 1713).
Tratados entre España y el ducado de Saboya (julio de 1714), las Provincias Unidas (julio de 1714) y Portugal (febrero de 1715).
Convenios comerciales entre Gran Bretaña y España (marzo y diciembre de 1714 y diciembre de 1715).

El «caso de los catalanes»

Una vez iniciadas las negociaciones en Utrecht la reina Ana de Inglaterra —quien, según Joaquim Albareda, "por motivos de honor y de conciencia, se sentía obligada a reclamar todos los derechos de que gozaban los catalanes cuando les incitaron a ponerse bajo el dominio de la Casa de Austria"— hizo gestiones a través de su embajador en la corte de Madrid —cuando aún no se había firmado ningún tratado— para que Felipe V concediera una amnistía general a los austracistas españoles, y singularmente a los catalanes, que además debían conservar sus Constituciones. Pero la respuesta de Felipe fue negativa y le comunicó al embajador británico «que la paz os es tan necesaria como a nosotros y no la querréis romper por una bagatela».23​

Finalmente el secretario de estado británico vizconde de Bolingbroke, deseoso de acabar con la guerra, claudicó ante la obstinación de Felipe V y renunció a que este se comprometiera a mantener las "anteriores normas regionales" catalanas. Cuando el embajador de los Tres Comunes de Cataluña en Londres Pablo Ignacio de Dalmases tuvo conocimiento de este cambio de actitud del gobierno británico consiguió que la reina Ana le recibiera a título individual el 28 de junio de 1713, pero ésta le respondió que «había hecho lo que había podido por Cataluña».24​

El abandono de los catalanes por Gran Bretaña quedó plasmado dos semanas después en el artículo 13 del tratado de paz entre Gran Bretaña y España firmado el 13 de julio de 1713. En él Felipe V garantizaba vidas y bienes a los catalanes, pero en cuanto a sus leyes e instituciones propias sólo se comprometía a que tuvieran «todos aquellos privilegios que poseen los habitantes de las dos Castillas».25​ El conde de la Corzana, uno de los embajadores de Carlos VI en Utrecht, consideró el acuerdo tan «indecoroso que el tiempo no borrará el sacrificio que el ministerio inglés hace de la España y singularmente de la Corona de Aragón, y más en particular de la Cataluña, a quienes la Inglaterra ha dado tantas seguridades de sostenerles y ampararles».26​

En las siguientes negociaciones llevadas a cabo en Rastatt el «caso de los catalanes» pronto se convirtió en la cuestión más difícil a resolver, porque Felipe V estaba deseoso de aplicar en Cataluña y en Mallorca la "Nueva Planta" que había promulgado en 1707 para los "reinos rebeldes" de Aragón y de Valencia, que suponía la desaparición como Estados.27​ Así, el 6 de marzo de 1714 se firmaba el tratado de Rastatt por el que el Imperio Austríaco se incorporaba a la paz de Utrecht, sin conseguir el compromiso de Felipe V sobre el mantenimiento de las leyes e instituciones propias del Principado de Cataluña y del reino de Mallorca que seguían sin ser sometidos a su autoridad. La negativa a hacer ningún tipo de concesión la argumentaba así Felipe V en una carta remitida a su abuelo Luis XIV:28​
No es por odio ni por sentimiento de venganza por lo que siempre me he negado a esta restitución, sino porque significaría anular mi autoridad y exponerme a revueltas continuas, hacer revivir lo que su rebelión ha extinguido y que tantas veces experimentaron los reyes, mis predecesores, que quedaron debilitados a causa de semejantes rebeliones que habían usurpado su autoridad. [...] Si [Carlos VI] se ha comprometido en favor de los catalanes y los mallorquines, ha hecho mal y, en todo caso, debe conformarse del mismo modo que lo ha hecho la reina de Inglaterra, juzgando que sus compromisos ya se veían satisfechos con la promesa que he hecho de conservarles los mismos privilegios que a mis fieles castellanos
En julio de 1714 Bolingbroke también rechazó una última propuesta del representante de los Tres Comunes de Cataluña en Londres Pablo Ignacio de Dalmases para que la reina Ana «tome en depósito a Cataluña o por lo menos Barcelona y Mallorca hasta la paz general sin soltarlas a nadie hasta que mediante tratado se adjudiquen y se asegure la observancia de sus privilegios» —en referencia a las negociaciones que tenían lugar en Baden—, porque eso podría suponer la reanudación de la guerra.29​ La corriente crítica hacia la política británica respecto de los aliados catalanes y mallorquines se plasmó además de en los debates parlamentarios en dos publicaciones aparecidas entre marzo y septiembre de 1714. En The Case of the Catalans Considered, después de aludir repetidamente a la responsabilidad contraída por los británicos al haber alentado a los catalenes a la rebelión y a la falta de apoyo que tuvieron después cuando lucharon solos, se decía:30​
Sus antepasados les legaron los privilegios de que gozan hace siglos ¿Ahora deben renunciar a ellos sin honor y han de dejar, tras de sí, una raza de esclavos? No; prefieren morir todos; o la muerte o la libertad, esta es su decidida elección.
[...]
Todas estas cuestiones tocan el corazón de cualquier ciudadano británico generoso cuando considera el caso de los catalanes... ¿La palabra catalanes no será sinónimo de nuestra deshonra?
Por su parte, The Deplorable History of the Catalans, tras narrar lo sucedido durante la guerra, elogiaba el heroísmo de los catalanes: «ahora el mundo ya cuenta con un nuevo ejemplo de la influencia que puede ejercer la libertad en mentes generosas».31​

El «caso de los catalanes» dio un giro completo cuando la reina Ana de Inglaterra murió el 1 de agosto de 1714 y su sucesor, Jorge I de Hannover, dio órdenes al embajador británico en París para que presionara a Luis XIV con el fin de que obligara a Felipe V a que se comprometiera a mantener las leyes e instituciones propias del Principado de Cataluña. Pero las presiones británicas no surtieron efecto en Luis XIV, a pesar de que desde hacía meses aconsejaba a su nieto «moderar la severidad con la que queréis tratarles [a los catalanes]. Aun cuando rebeldes, son vuestros súbditos y debéis tratarlos como un padre, corrigiéndolos pero sin perderlos». El embajador catalán Felip Ferran de Sacirera fue recibido en audiencia el 18 de septiembre por el rey Jorge I, que se encontraba en La Haya camino de Londres para ser coronado, en la que le prometió que haría lo posible por Cataluña, pero temía que fuera demasiado tarde. En efecto, unos días después se conocía la noticia de que el 12 de septiembre de 1714 Barcelona había capitulado.32​

Tanto el nuevo rey Jorge I como el nuevo gobierno whig, salido de las elecciones celebradas a principios de 1715, eran contrarios a los acuerdos que el gobierno anterior tory había alcanzado con Luis XIV y que habían constituido la base de la Paz de Utrecht, pero acabaron por aceptarlos porque las ventajas que Gran Bretaña había obtenido eran evidentes, lo que supuso que el viraje británico sobre el «caso de los catalanes» finalmente no se produjera.33​ El gobierno whig no hizo nada para ayudar a Mallorca, que aún no había caído en manos borbónicas, y el 2 de julio de 1715 Mallorca capituló.34​


Dicho sea de paso, y,, para no alargar mas el tema, una ultima cosa con su respectiva fuente;

FUENTE: https://es.wikipedia.org/wiki/Caso_de_los_catalanes


Caso de los catalanes fue la denominación usada en las cancillerías europeas para referirse al conjunto de debates y acuerdos sobre el destino político del Principado de Cataluña en el contexto de la Paz de Utrecht (1712-1714) que puso fin a la Guerra de Sucesión Española iniciada en 1701.


El origen del problema se remontaba al Pacto de Génova (20 de junio de 1705) mediante el cual el Reino de Gran Bretaña se había comprometido a garantizar la conservación de las constituciones de Cataluña si esta se sumaba a la causa del archiduque Carlos de Austria, en pugna por el trono español, incluso en el caso de una eventual victoria de Felipe V.

La iniciativa partió de la reina Ana de Inglaterra quien en marzo de 1705 nombró como comisionado suyo a Mitford Crowe, un comerciante de aguardiente afincado en el Principado de Cataluña, «para contratar una alianza entre nosotros y el mencionado Principado o cualquier otra provincia de España». Crowe se puso en contacto un grupo de propietarios y nobles de la plana de Vich, conocidos como los vigatans, que era el primer núcleo austracista surgido en Cataluña dispuesto a tomar las armas en contra de Felipe. Los vigatans se reunieron el 17 de mayo de 1705 en Vich y allí acordaron otorgar plenos poderes a dos representantes suyos para que firmaran el tratado con Inglaterra en nombre de los catalanes. El pacto fue rubricado en Génova el 20 de junio de 1705.2​

El acuerdo firmado por Mitford Crowe, en nombre de la reina Ana de Inglaterra, y por Antonio de Peguera y de Aymerich y Domingo Perera, en nombre del Principado incluía el compromiso de Inglaterra de desembarcar en la costa catalana 8.000 soldados de infantería y 2.000 de caballería de las fuerzas de la Gran Alianza, y entregar 12.000 fusiles con su correspondiente munición para armar a las fuerzas catalanas. Por su parte Cataluña reconocería al Archiduque Carlos de Austria como legítimo rey de España, y el nuevo rey debería jurar y mantener las leyes catalanas.3​

En el texto del tratado de Génova se apreciaba el ideario del austracismo catalán —y en general del resto de estados de la Corona de Aragón— que estaba basado en la defensa del modelo pactista y "constitucionalista" de las relaciones entre el soberano y sus súbditos, que anteponía la fidelidad a la "patria" -la defensa de las «libertades, leyes y derechos de la patria»- a la fidelidad al rey si este violaba las leyes e instituciones propias que la caracterizaban y definían.4​ Así aludía 17 veces a las Constituciones catalanas y a su defensa, lo que contrastaba con la política represiva de los virreyes nombrados por Felipe de Borbón —que por otro lado se quejaban de «lo que estrechan sus Constituciones», refiriéndose al poder efectivo que tenían en el Principado—


Muchas gracias por vuestra atención, y, bueno, saludos.
A nivel personal, lo que me da mas miedo no son los planteamientos y acciones individuales, sino las realizadas en grupo, ya que estas ultimas pueden acabar con consecuencias especialmente nefastas para todos.
Se responsable, consecuente y da ejemplo.
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programatrix

Cataluña nunca ha existido como nación ni como realidad nacional ni como sentimiento..., además la constitución de España NO permite su idependencia. Cataluña solo será independiente de España de dos modos:
a) Mediante una modificación de la constitución que apoye una mayoría alta de Españoles.
b) Mediante una guerra de secesión contra España.

Cualquier otra alternativa sería motivo para encarcelar al presidente del gobierno por alta traición y justificar la intervención del ejercito.


Escocia tiene todo el derecho a ser un país independiente ya que no existe ninguna clase de constitución ni ley que lo impida. Además en Escocia en el último referendum había un fraude de ley..., se aseguró que Reino Unido continuaría en la UE por eso se votó la permanencia, ahora que Reino Unido falló a su palabra debe existir un nuevo referendum.


Luego, me alegra que Reino Unido se decida, ahora todos los jubilados de Reino Unido en España que vayan pidiendo permisos de residencia, pagando la sanidad y a soltar dinerito. Se debe cerrar Gibraltar y aislarla económicamente. Finalmente es un buen momento para que la fuerza laboral que nos robó Reino Unido vuelva a España ahora con una mejor situación económica.