El ex apoderado de las Madres de Plaza de Mayo, Sergio Schoklender, aseguró este lunes que "nunca" manejó "la caja" de la asociación y sostuvo que con sus ingresos podría comprarse "una Ferrari o un avión".
En diálogo con el canal de noticias C5N, Schoklender dijo que su dinero le "alcanza" para comprar esos bienes y aclaró: "Nunca me enriquecí con el dinero de las Madres. Lo puedo probar. Está todo declarado".
El abogado, que cumplió condena por el asesinato de sus padres ocurrido hace 30 años, justificó su millonario patrimonio, producto de "buenos ingresos, patentes, royalties, desarrollos propios y contratos con empresas muy importantes".
Además, Schoklender aseguró que es blanco de acusaciones porque la meta es "péguenle a Schoklender que compete a las Madres y de paso es para pegarle a Cristina así esa secuencia perjudica a un gobierno"
"En estos días hablamos (con Bonafini) y me retó, como toda madre reta a su hijo, pero no quiero dar más detalles porque son conversaciones privadas", señaló.
Schoklender defendió a las Madres de Plaza de Mayo porque "nunca cobraron reparaciones económicas, ni pensión por desaparición de sus hijos; tienen una vida increíblemente austera porque creen que se repara con justicia y no con dinero".
En tanto, el abogado, quien reconoció que Bonafini "está dolida" con él, volvió a defenderse de las sospechas y acusaciones que se originaron tras su salida de la entidad de derechos humanos por el manejo de fondos para la construcción de viviendas sociales.
"El que dude de la honestidad de las Madres es un canalla. Suponer que las Madres puedan estar envueltas en un acto de corrupción es una canallada de la peor especie, con todo lo que este país le debe a las Madres y a los organismos de derechos humanos", afirmó Schoklender.
"Que quieran descalificar el trabajo de las Madres o de este proyecto para, por elevación, pegarle al gobierno nacional o extorsionar, es una canallada", sentenció.
El ahora ex apoderado de la entidad y responsable principal de la fundación Sueños Compartidos, que construía las viviendas, insistió con que su salida se produjo el 6 de mayo con la presentación de una renuncia que, según sus palabras, se hizo "con todo el agradecimiento de ellas", pero no de Bonafini.
"Hebe está muy dolida porque yo me fui. Yo renuncié con todo el agradecimiento a las Madres y el de ellas por mi trabajo y por todos estos años", aclaró Schoklender, mientras que admitió que "es probable que a Hebe no le haya gustado" que rompiera el silencio en el diario Clarín, al que la presidenta de Madres cuestiona permanentemente, en línea con el kirchnerismo.
Schoklender aclaró tener "un patrimonio importante", confirmó que adquirió "con su dinero" la quinta de José C. Paz -que tiene más de 10 habitaciones, pileta, quinchos, cancha de tenis- y aclaró que "está en condiciones por los ingresos" con los que cuenta para "tener lanchas y barcos", aunque negó que sea de su propiedad un yate valuado en 420 mil dólares.
"No soy pobre, no gano poco, tengo buenos honorarios, no vivía del dinero de la fundación sino de mi trabajo honesto. Tengo mis declaraciones juradas al día, todos mis impuestos pagos y nada que ocultar", afirmó en declaraciones radiales.
Finalmente, el ex apoderado precisó que tiene "un patrimonio importante, constituido por patentes, royalties, y desarrollos propios, como así también contratos con empresas muy importantes".
Fuente: PAGINAD
En diálogo con el canal de noticias C5N, Schoklender dijo que su dinero le "alcanza" para comprar esos bienes y aclaró: "Nunca me enriquecí con el dinero de las Madres. Lo puedo probar. Está todo declarado".
El abogado, que cumplió condena por el asesinato de sus padres ocurrido hace 30 años, justificó su millonario patrimonio, producto de "buenos ingresos, patentes, royalties, desarrollos propios y contratos con empresas muy importantes".
Además, Schoklender aseguró que es blanco de acusaciones porque la meta es "péguenle a Schoklender que compete a las Madres y de paso es para pegarle a Cristina así esa secuencia perjudica a un gobierno"
"En estos días hablamos (con Bonafini) y me retó, como toda madre reta a su hijo, pero no quiero dar más detalles porque son conversaciones privadas", señaló.
Schoklender defendió a las Madres de Plaza de Mayo porque "nunca cobraron reparaciones económicas, ni pensión por desaparición de sus hijos; tienen una vida increíblemente austera porque creen que se repara con justicia y no con dinero".
En tanto, el abogado, quien reconoció que Bonafini "está dolida" con él, volvió a defenderse de las sospechas y acusaciones que se originaron tras su salida de la entidad de derechos humanos por el manejo de fondos para la construcción de viviendas sociales.
"El que dude de la honestidad de las Madres es un canalla. Suponer que las Madres puedan estar envueltas en un acto de corrupción es una canallada de la peor especie, con todo lo que este país le debe a las Madres y a los organismos de derechos humanos", afirmó Schoklender.
"Que quieran descalificar el trabajo de las Madres o de este proyecto para, por elevación, pegarle al gobierno nacional o extorsionar, es una canallada", sentenció.
El ahora ex apoderado de la entidad y responsable principal de la fundación Sueños Compartidos, que construía las viviendas, insistió con que su salida se produjo el 6 de mayo con la presentación de una renuncia que, según sus palabras, se hizo "con todo el agradecimiento de ellas", pero no de Bonafini.
"Hebe está muy dolida porque yo me fui. Yo renuncié con todo el agradecimiento a las Madres y el de ellas por mi trabajo y por todos estos años", aclaró Schoklender, mientras que admitió que "es probable que a Hebe no le haya gustado" que rompiera el silencio en el diario Clarín, al que la presidenta de Madres cuestiona permanentemente, en línea con el kirchnerismo.
Schoklender aclaró tener "un patrimonio importante", confirmó que adquirió "con su dinero" la quinta de José C. Paz -que tiene más de 10 habitaciones, pileta, quinchos, cancha de tenis- y aclaró que "está en condiciones por los ingresos" con los que cuenta para "tener lanchas y barcos", aunque negó que sea de su propiedad un yate valuado en 420 mil dólares.
"No soy pobre, no gano poco, tengo buenos honorarios, no vivía del dinero de la fundación sino de mi trabajo honesto. Tengo mis declaraciones juradas al día, todos mis impuestos pagos y nada que ocultar", afirmó en declaraciones radiales.
Finalmente, el ex apoderado precisó que tiene "un patrimonio importante, constituido por patentes, royalties, y desarrollos propios, como así también contratos con empresas muy importantes".
Fuente: PAGINAD