Más de un tercio de los empleados en todo el mundo teletrabajarán antes de 2015

Iniciado por wolfbcn, 2 Junio 2013, 14:21 PM

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Fichar a las 9 de la mañana y salir a las 5 de la tarde responde a un esquema de organización del trabajo que puede tener los días contados para muchos, especialmente para aquellos que desarrollan su actividad frente a la pantalla de un ordenador. Según los últimos datos de la consultora estadounidense International Data Service (IDC), compañía radicada en Massachussetts especializada en analizar las tendencias del mercado en tecnología, telecomunicaciones y tecnología de la información, antes de que finalice 2015, es decir, en menos de año y medio, el 37,2% de la población mundial activa -más de un tercio- trabajará de forma remota, especialmente en Asia.

En España, según los expertos consultados por LaVanguardia.com, la tendencia alcista de implantación de este modelo organizativo se ha detenido momentáneamente debido a la coyuntura económica. Con un mercado laboral incierto, ahora impera lo presencial frente a lo remoto. Según los últimos datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), el 21,8% de las compañías españolas cuenta hoy con programas de trabajo remoto. Sin embargo, los datos que se desprenden de la última Encuesta de Población Activa (EPA) ponen en evidencia que el 91,8% de los ocupados no llegó a trabajar ni un solo día en su casa durante el año 2012; o dicho en otros términos, únicamente una de cada diez personas teletrabajó algún día en España el año pasado.

"El teletrabajo tiende a ir a más a pesar del bache actual", señala Oriol Amat, catedrático de Economía Financiera y Contabilidad de la Universidad Pompeu Fabra (UPF) y consejero de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). "En organismos públicos de ámbito estatal el teletrabajo está aumentando", afirma el profesor, quien apunta que de los 427 empleados de la CNMV, 39 participan en programas de teletrabajo.

El modelo tradicional, el que responde al esquema de 9 a 5 entre las cuatro paredes de una oficina, lleva funcionando muchos años para muchas personas y para muchas empresas en España. No ha llegado su fin, ni mucho menos. Sin embargo, la penetración de las nuevas tecnologías en el ámbito laboral y la posibilidad de comunicarse instantáneamente a través de diferentes canales y medios brinda la oportunidad de cambiar radicalmente este paradigma, desligarse del puesto físico de trabajo en un centro concreto y realizar la actividad profesional desde casa o desde la ubicación que el empleado desee.

Este fue el camino que emprendió la compañía tecnológica Yahoo! hace unos años. Sin embargo, el pasado mes de febrero, la consejera delegada de la empresa, Marissa Mayer, tomó la controvertida decisión de ordenar la vuelta a la oficina a sus teletrabajadores (200 de una plantilla de 13.000), medida que fue ampliamente criticada desde diversos sectores y que reabrió el debate del teletrabajo.

Los expertos preguntados por LaVanguardia.com han hecho hincapié en recordar que teletrabajo no es únicamente trabajar desde casa. Teletrabajo es trabajar a distancia. En la terraza de un bar o en el AVE Barcelona-Madrid. Se trata de una modalidad laboral que tiene más presencia en las grandes compañías, donde alcanza el 60%, y se queda en el 18% en las compañías de menos de 10 empleados.

José Ramón Pin, economista y profesor en el Iese, también opina que "la tendencia de fondo es que aumentará el teletrabajo en España". Pin lo argumenta señalando que los transportes, la conciliación entre el trabajo y la familia, la facilidad de comunicación entre personas por la tecnología y el aumento de los autónomos convertirá el trabajo a distancia a largo plazo en un "arma indispensable para las economías".

Sin embargo, el trabajo en remoto también tiene sus aspectos negativos. Para Àngels Valls, investigadora del Instituto de Estudios Laborales de ESADE, sus puntos negros están en el alejamiento de la persona en la organización y en su aislamiento. "Se ha llegado a la conclusión que en los encuentros informales se generan conexiones entre las personas que difícilmente aparecen cuando se trabaja en remoto, algo que beneficia a la organización", apunta la profesora. El aislamiento del trabajador con la organización y el llamado síndrome del pijama son otros de los aspectos negativos asociados al trabajo en remoto. Asimismo, según los expertos, el principal riesgo para los teletrabajadores es la escasa promoción dentro de la organización.

Pin, por su parte, se pregunta quién se hace responsable en caso de un accidente laboral de un teletrabajador en su domicilio. "Es algo que deben resolver los convenios concretos", apunta. En la última reforma laboral (Real Decreto Ley 3/2012, de 10 de febrero) se incluyó un apartado específico para el teletrabajo. Aunque todavía quedan lagunas, entre los aspectos más destacables, se equipara los derechos de los trabajadores presenciales con los de los teletrabajadores y obliga al empresario que contrate bajo esta modalidad a proporcionar los medios necesarios al empleado, entre otros aspectos.

¿Y aumenta la productividad con el teletrabajo? Según datos ofrecidos por un informe de la compañía tecnológica NetApp, el 87% de los directivos informan de un aumento de la productividad de entre el 5 y el 25% de los teletrabajadores respecto al empleado de oficina. Asimismo, también se señala en dicho informe que 25 horas trabajando desde casa equivalen a 40 horas en la oficina. Y otro dato más: el trabajador remoto medio dedica un 11% más de horas a trabajar que el oficinista convencional.

http://www.lavanguardia.com/vida/20130531/54375018747/teletrabajo-tercio-empleados-undo-2015.html
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